DÍA 14 - VICTORIA SOBRE LA ENFERMEDAD

Día: 14 - Semana: 2 - Autor: Pr. Bernardo Affranchino



Pasaje

Juan 9:6 Dicho esto, escupió en el suelo, hizo barro con la saliva y se lo untó en los ojos al ciego, diciéndole: 9:7 Ve y lávate en el estanque de Siloé (que significa: Enviado). El ciego fue y se lavó, y al volver ya veía.


Oración

Señor oro por toda dolencia en mi vida, en la de mi familia y en el cuerpo de Cristo. Hoy oro por aquellos que batallan con la enfermedad, que sean sanos en Tu Nombre, que alcancen victoria sobre toda dolencia, sea del origen que sea. Señor te pido que éste año, al hacer el llamado en las calles veamos sanidad n cuerpos y corazones, para la gloria de Tu Nombre.


Desarrollo

Isaías había profetizado que en Sus llagas, alcanzaremos sanidad. Los milagros de salud, fueron una constante en la vida de Jesús y hoy sigue igual. Hermoso pasaje el que contemplamos hoy. Mi pastor decía que los milagros son el marketing de Dios, que es la forma en que Dios muestra Su poder y desafía la racionalidad humana. Este hombre, era ciego de nacimiento, es decir, que todo mundo en su barrio y en su círculo de relación, conocía su estado y en algún momento de esos cuarenta años que tenía de vida, lo habían visto mendigando en algún lugar. La tradición popular, declaraba que si alguien estaba en tal condición era a causa de algún pecado, así que los discípulos preguntan eso a Jesús, con el agregado de que quizás sus padres pudieran ser los causantes de tal desgracia, ya que éste hombre acarreaba la ceguera desde bebé. Todavía hoy se escuchan preguntas así. Si algo malo pasa a alguien del pueblo de Dios, debe ser porque algo hizo… Jesús contesta de manera simple. No pecó nadie en especial, pero puede ser una oportunidad para la Gloria de Dios. ¿Puede el pecado acarrear enfermedad? La verdad es que sí, de hecho hay pasajes en la Biblia donde personas quedaron sanas por perdón de pecados, pero no es una regla. Imagine que si fuéramos castigados con enfermedades por nuestros errores, estaríamos complicados ¿conoce a alguien sin pecado? La Biblia declara que todos pecamos, luchamos por superarlo y ser perfectos, pero tenemos caídas. El punto es que estemos luchando por no caer, pero será tema de otro día. Jesús se agacha y hace barro con la saliva, lo unta, se sana. A otro ciego lo sanó con una palabra y a otro le reprendió la enfermedad. No tiene que ver con la forma en que hacemos las cosas, sino con los principios. El milagro, debe contener fe en Jesucristo. La pone el enfermo y además creer que Dios puede usar a ese instrumento humano que tiene allí delante. Otras veces la fe la pone el que ministra, e incluso en algún pasaje, alguien pone al enfermo delante de Jesús, en la convicción de que Él obrará. En la cruz hay victoria sobre la enfermedad, en la fe de que Jesús obrará veremos Su mano actuar