Pasaje

“ Que si confiesas con tu boca a Nuestro Señor Jesús y crees en tu corazón que Dios lo levantó de los muertos serás salvo.” Romanos 10:9

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Oración

Bendigo a cada persona que tengo alrededor y oro para que abran sus corazones a Jesús, úsame Señor, quiero ser un instrumento de Tú amor.

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Declaración

Señor, renuncio a la vergüenza y rechazo el temor. Me niego a callar, porque sé que Tu Espíritu, quiere hablar y yo quiero ser un instrumento de Tu Voz. Señor declaro a mi iglesia libre de toda vergüenza y temor. Padre declaro que la proclamación pública de Tu obra a través del Vía Crucis llevará salvación.

Desarrollo

Un fe que no se vuelve evidente, no es verdadera. Se vuelve evidente a través de nuestros cambios, del interés por el prójimo, la adoración pública y la confesión de lo que creo. Cuando hablamos de confesión, hablamos de la declaración evidente, con nuestros labios, contando lo que hay en nuestros corazones. Debemos contar lo que tenemos dentro. Un cristiano verdadero, no dejará de contarle a alguien que cree en Jesús, que éste le dio una nueva oportunidad y todo lo que ese encuentro ha generado en su vida y en su entorno. Si callamos, cerramos puertas a los demás. Me pregunto si algunos se callan, porque quizás no creen. Cuando descubrimos algo que consideramos valioso, lo compartimos y tratamos de que la mayor cantidad de nuestros amigos se enteren. Lo mismo hacemos con eventos importantes para nosotros, como el nacimiento de nuestros hijos. Está comprobado, que uno de los medios más efectivos para transmitir la existencia de ofertas comerciales, es el efecto viral del boca a boca. El infierno lo sabe y quiere callarte. No accedas, habla, confiesa el Amor de Dios por Ti. La confesión, la declaración traerá salvación delante de tus ojos, para ti y los que te rodean.