Evangelio según Lucas 2° Parte



Pasaje

“Si, les he dado autoridad a ustedes para pisotear serpientes y escorpiones y vencer todo el poder del enemigo; nada les podrá hacer daño.” (10:19)


Oración

Te doy gracias Señor por tu respaldo y protección. Gracias porque puedo respaldarme en Tu nombre, no son mis logros los que me cubren, sino los tuyos. Declaro victoria sobre toda batalla. Se que puedo caminar en total certeza de Tu protección, no seré tocado. El infierno respeta el Nombre de Jesús. Declaro Señor que Tú cubrirás cada paso de Gracia que se da en nuestra ciudad. Avanzamos confiados en Ti.


Declaración

Los especialistas, que consideran que Lucas utilizó el Evangelio de Marcos como fuente para escribir el suyo, fechan el tercer Evangelio en los años 70 d.C. Lucas escribió su Evangelio para asegurar a Teófilo que Dios aún obra en la comunidad cristiana fundada por Jesús. Lucas presenta la gracia de Dios según se revela en el ministerio de Jesús en la tierra. Destaca que esta gracia está al alcance de los gentiles, aun cuando las promesas relacionadas con el ministerio de Jesús se remontan a la historia de Israel (1:1-4). El rechazo de Israel no significa el fracaso del plan de Dios. Por el contrario, aunque no lo sabían, el rechazo era parte del plan de Dios desde el principio (Hch 2), la persecución de la comunidad cristiana iba a ser el medio por el cual la iglesia difundiría las Buenas Nuevas por el mundo. Jesús mismo había anunciado que esto ocurriría (24:45).

Desarrollo

Ayer terminamos hablando de la presencia del Espíritu Santo, como una clave de éste evangelio. Vamos a ampliar esto para poder sacar mayor fruto del pasaje elegido para hoy. La acción del Espíritu Santo se ve en las vidas de varias personas fieles vinculadas con el nacimiento de Juan el Bautista y Jesús. Fue el Espíritu Santo quien puso a Jesús en condiciones de cumplir su ministerio y el mismo que actuó a través de la oración de Jesús, infundirá poder a las oraciones de los discípulos (18), y vinculará el ministerio mesiánico de Jesús al poderoso ministerio de ellos a través de la Iglesia (24:48).

Reflexión

Claramente, la declaración de Jesús acerca de serpientes y escorpiones, se refiere a poderes espirituales demoníacos y no literalmente a los animales citados.

La promesa de Jesús de hoy es bien importante.

Hemos hablado mucho acerca de las luchas que nos toca enfrentar y es muy bueno que sepamos que hemos recibido armas para vencer. No son nuestras, no es a causa de nuestros logros, sino, que nos han sido dadas por Cristo.

“4Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas” dice 2º Corintios 10, en referencia a las armas recibidas. Este ejercicio, conlleva una manera de orar.

No haremos un estudio acerca de la oración intercesora pero veremos algunos rasgos generales.

Esta es una clase de oración que requiere más de 5 minutos. La oración guerrera lo pone en el frente mismo de batalla, cara a cara con su enemigo. Puede llevar una hora, un día o semanas. Dios busca más guerreros de oración. Todo triunfo del Reino depende de las oraciones de los santos.

Dios te pide que te coloques la armadura espiritual y entres en acción. Todo creyente debe apartar un tiempo especial diario para este tipo de oración. Un tiempo en el cual cubrir de oración la Iglesia, los pastores y el liderazgo en general. Un tiempo en el cual reclamar la ciudad en la que vivimos para CRISTO y romper los baluartes del hombre fuerte sobre esa zona.

Un clamor por nuestras familias.

La tarea del combatiente no es para “los santos viejos” sino para toda la Iglesia.

La unión con otro creyente en oración, aumenta el poder para atar a Satanás.

Una Iglesia unida que ora, es el peor problema para el infierno. Es por eso que Satanás busca destruirnos y evitar que oremos. ¿Vamos a darle lugar?

No estamos solos en la pelea, ni expuestos a merced de la obra del infierno, la autoridad y poder han venido de El.