PALABRAS DE VICTORIA

Seremos sostenidos



Pasaje

“No temas porque Yo estoy contigo; no te desalientes porque Yo soy Tú Dios. Te he fortalecido, ciertamente te he ayudado y también te he ayudado con mi diestra de justicia.” Isaías 41:10


Oración

Señor, nuevamente me rindo a Ti. Doy gracias por el día en que te recibí en mi corazón y nuevamente decido caminar mirando hacia Ti.


Declaración

En el Nombre de Jesús, reprendo todo desaliento y temor. Tú Señor estás conmigo y no me abandonas jamás. Es Tú mano de justicia la que me sostiene y no mis propias obras personales, por eso me animo a clamar, porque no es mi justicia ni mi perfección, sino Tú mano sobre mi. Declaro bendición sobre la próxima Semana Santa. Declaro día de salvación. Cancelo todo plan del infierno y oro por un clima de bendición.

Desarrollo

No hay persona, que desconozca la sensación de falta de fortaleza. Absolutamente todos, lo confesemos o no, en algún momento pasamos por el valle del desaliento y de la debilidad. Esto proviene de que somos frágiles. Escuchamos historias de gente que lo ha perdido todo en un momento y la misma Biblia, dedica todo un libro a un hombre y su crisis llamado Job. Está allí para que recordemos que si nos visita la prueba, la solución será alzar la vista y buscar a Dios. Además del temor, nuestra otra batalla común es contra la soledad. Igual que el pasaje que mirábamos ayer, Dios viene a recordarnos que está con nosotros si decidimos no movernos por nuestra cuenta. Hay una diferencia entre caminar con Dios y ser rescatados por Dios. No podemos ni debemos creer que adonde se me ocurra ir, indefectiblemente Dios me seguirá. En ocasiones nos pasan cosas, por ir a lugares o situaciones sin Su compañía. Ser fiel, tiene que ver con estar pegado, copiando el original. Pegado a Dios. No hay mejor lugar. La vivencia de la Presencia continua, viene esa cercanía, así que una buena decisión es no estar por nuestra cuenta y pegarnos a El. Esa comunión, ahuyenta el temor, mata el desaliento y me sostiene.